Sudoración excesiva y olor de pies: HIPERHIDROSIS Y BROMHIDROSIS

La persona que tiene sudor de pies, de forma general suele sufrir también sudor en axilas y manos, pues se trata de sudoración nerviosa. Este proceso normalmente no se manifista con mal olor, pero en ocasiones aparecen bacterias que son las responsables de este desagradable olor.

En el pié se conoce como podobromhidrosis que es el olor fétido de los pies por parasitación e infección del folículo piloso y la glándula sebácea de bacterias u hongos, y es consecuencia de una excesiva sudoración. Se trata de un problema embarazoso que agravan con la pubertad, el estrés, el calor, etc. 

La hiperhidrosis se trata de una afección caracterizada por el exceso de sudoración que causa maceración en la piel, generalmente acompañada de mal olor, y que en la mayoría de ocasiones se asocia con la aparición de hongos.Ante estos problemas, se aconsejará una serie de medidas como alternar el calzado, usar calcetines de fibras nobles, airear y secar los calzados, y en el caso de los calcetines, es mejor el uso de los fabricados en algodón y de cierto grosor.

Este trastorno podal puede minimizarse con productos antitranspirantes de uso diario. Para sudoraciones normales, se aplican cremas, sprays o polvos desodorantes que actúan en los pies y en los zapatos, neutralizando los malos olores y regulando la excesiva transpiración. 

 


Sudoración excesiva y olor de pies: HIPERHIDROSIS Y BROMHIDROSIS

La persona que tiene sudor de pies, de forma general suele sufrir también sudor en axilas y manos, pues se trata de sudoración nerviosa. Este proceso normalmente no se manifista con mal olor, pero en ocasiones aparecen bacterias que són las responsables de este desagradable olor.

En el pié se conoce como podobromhidrosis que es el olor fétido de los pies por parasitación e infección del folículo piloso y la glándula sebácea de bacterias u hongos, y es consecuencia de una excesiva sudoración. Se trata de un problema embarazoso que agravan con la pubertad, el estrés, el calor, etc. 

La hiperhidrosis se trata de una afección caracterizada por el exceso de sudoración que causa maceración en la piel, generalmente acompañada de mal olor, y que en la mayoria de ocasiones se asocia con la aparición de hongos.Ante estos problemes, se aconsejará una serie de medidas como alternar el calzado, usar calcetines de fibras nobles, airear y secar los calzados, y en el caso de los calcetines, es mejor el uso de los fabricados en algodón y de cierto grosor.

Este trastorno podal puedeminimizarse con productos antitranspirantes de uso diario. Para sudoraciones normales, se aplican cremas, sprays o polvos desodorantes que actúan en los pies y en los zapatos, neutralizando los malos olores y regulando la excesiva transpiración. 



Metatarsalgias

La metatarsalgia se caracteriza por el dolor en la zona metatarsal que precede a los dedos, se manifiesta en el el momento de realizar el despegue.

Un zapato innadecuado, una suela demasiado delgada o un talón excesivamente alto suelen ser las causas mas habituales, pero hay personas con un tejido adiposo pobre es decir, la grasa plantar que permite almohadillar y hacer que los metatarsianos se apoyen en el suelo. 

No deja de ser una afección caracterizada por una inflamación de las articulaciones metatarsofalángicas. Cuando el ser humano camina, el pie siempre entra por el segmento externo y entonces se inicia una secuencia en la que el eje de traslación va desde el quinto dedo al primero, que es el propulsor. Si en esa secuencia se despega por metatarsianos que no tocan, el segundo o el tercero,se producen molestias que incluso pueden producir un derrame articular, comparable a lo que se sufriría si los nudillos de las manos se inflamaran.

Un examen físico suele ser suficiente para dar un diagnóstico; en raras ocasiones se recurre a una radiografía.



Fascitis

La fascitis plantar es una inflamación aguda de la aponeurosis plantar del pie, que es una estructura de tejido conjuntivo que sostiene la musculatura plantar, "es la cuerda que tensa el arco".

El síntoma principal es el dolor en el talón o en la zona media de la planta del pie, especialmente durante los primeros pasos de la mañana.
Las principales causas de la inflamación de la fascia suelen ser: Un aumento de la actividad deportiva, obesidad, un calzado inadecuado…etc.
Dos de las más importantes residen en la morfología de los pies, especialmente en los más pequeños.
En un pie pronado, al estar más aplanado de lo normal, provoca una tensión excesiva en la fascia, lo que provoca una inflamación aguda de la misma. Por el contrario, en un pie cavo, con demasiado puente, la fascia está sometida a una excesiva tensión y tracción muchas veces ocasionada por el tendón de Aquiles.

Un tratamiento efectivo consistirá en un análisis biomecánico de la marcha o de la carrera por medio de una plataforma de presiones que nos revele el comportamiento del pie en dinámica. Nos puede ser de gran ayuda para averiguar la causa de la fascitis.

El tratamiento por excelencia es la elaboración de unas plantillas personalizadas que neutralicen el pie y eviten tracciones excesivas durante la marcha. Otros tratamientos coadyuvantes durante la fase aguda pueden ser las infiltraciones con corticoides, los vendajes neuromusculares y la fisioterapia.



Neuroma de Morton

Un Neuroma de Morton es un dolor muy fuerte de muy poca duración que obliga al paciente a pararse si está caminando y que en ocasiones requiere la necesidad de quitarse el calzado y masajearse el pie, tras lo cual los síntomas desaparecen. Esta dolencia es bastante más frecuente de lo que parece e incide especialmente en el sexo femenino.

El origen de esta afección es un nervio en el dorso del pie que, en el punto de bifurcación hacia los dedos, se inflama, se engrosa y forma un pequeño quiste. En función de la manera de caminar, ese bulto membranoso queda pellizcado en tre los metatarsianos, causando el citado dolor. Así, pues, la causa primaria de este trastorno podría residir en un defecto mecánico en la forma de andar que, al provocar un roce entre el nervio y el hueso, va creando poco a poco el quiste. 

El diagnóstico es fundamentalmente clínico, aunque una resonancia magnética lo confirma definitivamente. El procedimiento siguiente pasa por aplicar la cirugía con el fin de extirpar el caparazón membranoso que causa el dolor. Si tras la intervención permanecen algunas de las molestias, se puede estar ante una alteración biomecánica que precisará una actuación ortopédica tipo plantillas.



Enfermedad de Sever

Una de las causas más frecuentes de dolor en el talón del niño es la enfermedad de Sever, conocida también con el nombre de apofisitis del calcáneo. Una alteración más propia de niños que de niñas. Es un dolor que aparece a nivel del talón sobre todo al realizar actividades físicas. Las estructuras de crecimiento del hueso no son paralelas al crecimiento muscular del tendón. Es un motivo frecuente de visita al podólogo en niños.

La enfermedad de Sever se caracteriza por un dolor localizado en la parte posterior del talón que puede aparecer desde los seis hasta los 12 años aproximadamente, que esta en función de la calidad del hueso del niño en su época de crecimiento, y se da especialmente en aquellos niños que practican deporte.

Suele ser un dolor que el niño lo manifiesta después de un entrenamiento o al día siguiente y es un dolor que va y viene a temporadas. Es un dolor punzante, un dolor vivo, que obliga en ocasiones al niño a ir cojeando.

Al ser una zona que debido al crecimiento esta relativamente inflamada se da más en niños que practican deporte por el golpeo del talón en el suelo al ser repetitivo y más virulento

El reposo ayuda a disminuir el dolor, si bien es muy necesario saber como se practica deporte, ya que hay que utilizar las zapatillas adecuadas, hacer el movimiento natural del ejercicio sin forzar articulaciones innecesarias, controlar los apoyos del pie, etc.

El tratamiento suele basarse en la recomendación de reposo en fase aguda, evitar ciertos ejercicios, cambiar el tipo de calzado y si es preciso medicación, mediante antiinflamatorios , así como técnicas de fisioterapia, y en el peor de los casos, la inmovilización mediante yesos. Habitualmente mejora con medidas conservadoras asociadas a plantillas a medida con taloneras